Todas las bandas y todos los álbumes son los mejores del mundo según sus notas de prensa. Pero esta es la banda buena y esto, te aseguro, es lo mejor del año. Palabrita. Parece que estar lejos de Madrid les ha brindado a estos chavales de Málaga la auténtica experiencia de aquello que Ayuso decía de no sé qué de la libertad. A cañas sí que se han hinchado. Da igual. Este disco no es lo que te imaginabas. Tampoco es noise pop del que anualmente Spotify te dice que te has hartado de oír. Y eso que ‘Sheriff Playa’ lo edita Sonido Muchacho, eh. Posiblemente de un grupo como La Trinidad veías venir otro álbum de pop, cada vez más luminoso, cada vez más recargado y con las baterías sonando como las de Slayer. Rollito indie. Una versión de reggaetón no te esperabas, ahí sí que te dan la razón y cumplen con tus expectativas.
Una sola guitarra sin pedales, un bajo por línea, una batería sin platos y como Dios manda (no hay caja de ritmos soviética que valga), un par de teclados y un delay como los de King Tubby. Sonido Nueva York grabado en Motril, que es una costa tropical y además se nota, porque en ‘Sheriff Playa’ también hay sitio para el dub