Como si de una declaración de principios se tratase, Los Marcianos publican Contra el mundo, su nuevo disco, con apenas un año de diferencia con su predecesor, que sin duda les abrió muchas puertas. En esta nueva colección de canciones, producidas de nuevo por Carlos Hernández (Los Planetas, Triángulo de Amor Bizarro, Carolina Durante…) volvemos a encontrar esos estribillos contagiosos, esa urgencia que les caracteriza y sobre todo, canciones, algo de lo que siempre han hecho bandera. Esta vez, más cerca de sonidos de principios de los ochenta, como The Cure, New Order o The Smiths pero siempre con esos muros de guitarras y energía shoegaze que ya dejaron patente en Nuevo Orden Cósmico (Clifford, 2019).
Los vigueses, dan así otro pequeño paso en su evolución, asentándose poco a poco como una de las bandas más a tener en cuenta en la escena indie nacional, a la que aportan melodía, letras y estribillos pop, en unos tiempos en los que cada vez es menos habitual y que, sin duda, les llevará a importantes escenarios en el próximo 2020.